De tanto en tanto me pongo a pensar,
¿Porque alza la mirada buscando la luna,
Aquel solitario lobo en el peñasco
Que solo le aúlla como si lo escuchara?
Pero cuando las horas están pasadas,
Y la noche se ha apoderado de mi espacio,
Miro a la luna mascullando palabras
Queriendo que me escuchase.
Porque desde mi solitaria posición,
La miro como si su pálida cara
Fuese la tuya iluminada e iluminando,
Mi rostro sediento de ti.
Pero la luna sigue allá arriba,
Y mientras la veo sentado en un peñasco,
Un lobo me mira y masculla,
¿Qué mirará y hablará a la luna cual lo escuchara?
No hay comentarios:
Publicar un comentario